Matemáticas

El dia en el que nace esta bitácora, no está demás abrir un espacio de opinión sobre una de las materias claves en la educación: las Matémáticas, a la vez tan odiadas por algunas personas y queridas por otras.

Si os animáis y dejáis comentarios sinceros (estoy seguro de que gustan más de lo que se dice), se podrá tener una visión general sobre la actitud hacia las Matemáticas que se respira en el centro.

Para comenzar, ahí va mi opinión. Resolver un ejercicio o problema matemático puede convertirse en una gran aventura que puede llevar a la decepción si no se logra concluir correctamente. Lo que hay que hacer en este caso es volverlo a intentar y pedir la ayuda necesaria hasta que se resuelva. Pero si el ejercicio se resuelve, y sobre todo si ha costado gran esfuerzo, se experimenta una sensación de felicidad, de paz, de elevación de la autoestima, de capacidad de esfuerzo..., y sobre todo, de "hambre de saber". En efecto, la curiosidad se despierta y se deseará hacer otro problema y si ese proceso continúa y continúa marcará no solo tus estudios, sino también tus actos, tu forma de pensar, tu forma de afrontar otros problemas en la vida, etc.

Esto no deja de ser una opinión de alguien que ha pasado buenos, malos y muy malos ratos con las Matemáticas, pero que sin duda alguna, piensa que los aspectos positivos merecen tanto la pena que compensan con creces los negativos. Espero vuestros comentarios y que éstos no sean únicamente negativos porque estoy seguro de que os gustan aunque quizás aún no lo hayáis descubierto.